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¿Sabías que...?
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Las plantas bulbosas tienen
la capacidad de almacenar alimentos que les hará sobrevivir en un
periodo de condiciones climatológicamente adversas, hasta que su ciclo de
crecimiento sobre la superficie del suelo vuelve a iniciarse. Este periodo de
inactividad puede ser resultado natural del invierno o ser causado por la
sequía.
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El bulbo también tiene otros nombres,
por ello cuando se lleva a cabo un estudio técnico, debemos de profundizar en
los mismos y, por lo tanto, hablaremos de órgano subterráneo carnoso.
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Recuerda
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Los órganos subterráneos de
almacenamiento se pueden dividir en bulbos verdaderos, raíces tuberosas, cormos, tuberos y rizomas.
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Clasificación
de los bulbos desde el punto de vista fisiológico
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Bulbos verdaderos. De todas las plantas descritas,
solamente alrededor de la mitad, se desarrollan a partir de bulbos auténticos.
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Recuerda
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Un bulbo autentico consiste en una planta muy pequeña
formada en su totalidad y contenida dentro de un embalaje de escamas
carnosas. Si se corta verticalmente un bulbo de tulipán, en la época de
plantación, podremos ver una forma de vida en miniatura con flores muy
pequeñas, tallo, hojas y raíces que se han estado formando durante los meses
del verano.
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Las escamas que rodean el embrión, son
hojas modificadas que contienen todos los alimentos necesarios para sostener el
bulbo durante el periodo de inactividad y durante el crecimiento temprano. Las
escamas pueden encontrarse sueltas y abiertas como las de un Lilium, o
apretadas y compactas como las de un tulipán. Si se corta un bulbo compacto por
la mitad horizontalmente, las escamas se ven como círculos, alrededor de las
escamas muchos bulbos poseen una cobertura fina como el papel y que se conoce
como la “túnica”, en la base del bulbo se encuentra un tallo modificado o el
plano inferior, del que emergerán las raíces. Este plano inferior también
mantienen las escamas juntas, durante la temporada de crecimiento y se formaran
nuevos bulbos (bulbitos o retoños), de los nudos laterales sobre los planos
inferiores, en algunos bulbos como en el caso del tulipán, los bulbos viejos
mueren y sobreviven solamente los nuevos bulbos.
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Cormos.
Un cormo es en
realidad un tallo modificado para convertirse en una masa de tejido de
almacenamiento, si se corta un cormo horizontalmente por la mitad, no se puede
observar ningún círculo.
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Recuerda
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La punta del cormo, posee uno o más puntos de crecimiento u
ojos, que son visibles cuando se examinan de cerca. Los cormos están
cubiertos por las bases de hojas secas que se parecen mucho a la túnica que
cubre a muchos bulbos, no existen escamas ensanchadas.
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Las raíces crecen desde el plano inferior de
la base del cormo, en la medida en que la planta crece, el cormo se consume, y
se forman nuevos cormos y cormillos en la punta del mismo o a su lado y además
algunos cormos como el gladiolo, forma cormillos alrededor del plano inferior
de la base alrededor de su raíces, mientras que los grandes cormos producirán
flores al año siguiente, los cormillos, necesitarán de dos a tres años para
hacerse grandes y poder florecer.
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Tuberos. El tubero subterráneo, es un tallo sólido
similar al cormo y que no obstante carece tanto del plano inferior de base como
de la cobertura de tipo túnico que poseen estos. Las raíces y retoños crecen de
yemas de crecimiento de nudos o de ojos, que se encuentra dispersados sobre su
superficie, en la medida en que la planta crece, algunos tuberos como las
patata, disminuyen de tamaño y forman nuevos tuberos, mientras que en el caso
de otros, como el “ranúnculus”, incrementan su tamaño en la medida en que
almacenan elementos nutritivos y desarrollan nuevas yemas de crecimiento para
el año siguiente.
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Raíces tuberosas. Estas unidades de almacenamiento de
nutrientes, se parecen a los tubérculos, pero son en realidad raíces hinchadas,
antes que tallos, durante su crecimiento producen raíces fibrosas que son de
donde toman la humedad y los alimentos. Aparecen nuevas yemas de crecimiento
sobre la base del tallo viejo, allí en donde se junta con la raíz tuberosa. Las
raíces pueden dividirse cortando una sección de las mismas que soporta una
parte del tallo viejo que presenta un “ojo”.
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Rizoma. Los rizomas son en realidad unos
tallos ensanchados que se ramifican y que sirven de almacenamiento. Crecen
lateralmente a lo largo justo debajo de la superficie del suelo. Las raíces se
desarrollan sobre la superficie inferior, mientras que las yemas se presentan
sobre la parte superior del rizoma y producen las nuevas plantas durante la
temporada de crecimiento.
Formación
del primordio floral
Hay especies en la que formación del
embrión tiene lugar en el bulbo mucho tiempo antes del periodo de floración, y
hay otras en las que ocurre casi simultáneamente a la aparición de la hoja o
inmediatamente después de la aparición de un número apreciable de ellas,
variando por tanto el comportamiento en cuanto a un cultivo forzado se refiere.
Es imprescindible por lo tanto conocerlo para poder llevar a cabo el
tratamiento más adecuado.
Dormancia
Se
acepta la dormancia como un detenimiento en el crecimiento de la planta,
caracterizado por una disminución
en la actividad metabólica y, desde luego, controlada por distintos
sistemas hormonales, es decir, su inicio y término viene determinado por una
inclinación en el balance de inhibidores o promotores hormonales.
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¿Sabías que...?
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Se han distinguido 3 tipos
de dormancia diferentes entre las
especies de bulbosas.
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Tratamientos
térmicos
Desde los años treinta se han hecho numerosos
estudios acerca de tratamiento térmicos a realizar sobre bulbos, tanto para
acortar su periodo de dormancia como para
mantenerlo en “reposo” un largo periodo de tiempo.
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¿Sabías que...?
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Para el caso del Lilium el
periodo de “reposo” de estos bulbos se acorta si recién cosechados se someten
a bajas temperaturas: 6 a
10 semanas entre 2.2 y 10 ºC.
Provoca la ruptura más rápidamente pero este aumento en la precocidad de
brotación y floración va acompañado de una disminución en el número de flores
y de hojas.
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Otro ejemplo
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Los gladiolos una vez cosechados los cormos se
someten a temperaturas elevadas (28-30 ºC) y corrientes suaves de aire para
conseguir un buen secado; inmediatamente
después se introducen en cámaras frigoríficas a 4 ºC y 70-80% de humedad
relativa, durante 45-60 días, según las variedades utilizadas. Si lo que deseas
es mantener el reposo, bastará con dejar los cormos en las condiciones de
frío.
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Condiciones
ambientales de cultivo
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Sustratos. De forma general estos cultivos requiere terrenos sueltos, con buen drenaje, que
permita un buen desarrollo radicular, y que no mantenga excesos de humedad a
nivel de bulbo, para evitar problemas fitosanitarios. En general, los pH
neutros son los más adecuados.
§
Abono. Hay
que tener en cuenta que, en general, los bulbos poseen suficientes sustancias
de reserva como para permitir una brotación sin problemas, y que exceso de
abono conduce la aparición de puntas de hojas ”quemadas” perjudicando la calidad del
producto final.
§
Luz. Su
incidencia es mucho mayor en aquello géneros en los que la flor se forma
después de replantado el bulbo. La longitud de día influye en el porcentaje de
varas florales cosechadas. El periodo de
formación de la espiga es la más crítica, la existencia, durante él, de días
cortos intensidad lumínica baja, provoca reducciones tanto en el porcentaje de
floración.
§
Temperatura. Es un factor muy importante, ya que influye en el
desarrollo del cultivo y muy directamente, en la formación floral. En términos
generales se admite que las temperaturas suaves (próximas a 20 ºC) son las más indicadas
para su cultivo. Temperaturas excesivamente elevadas conducen a malformaciones
florales y abortos o disminución de la calidad floral y en casos extremos la
planta puede no florecer.
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Para saber sobre este tema se
recomienda consultar en las siguientes páginas web
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Métodos
de propagación
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